viernes, 29, septiembre, 2023
CubaOnLine

La comida de esta región colombiana tiene sus orígenes en la herencia paisa, quienes a su vez la heredaron de los españoles que llegaron en la época de la colonia.

CORRESPONSAL EN COLOMBIA 

El Eje Cafetero está conformado por los departamentos de Caldas, Quindío y Risaralda. Las ciudades principales son sus respectivas capitales Manizales: Armenia y Pereira. Lo particularmente llamativo es que no son el centro del turismo de sus departamentos, sin embargo, sí son el puente de conexión con los otros municipios del Eje y de esta zona con el resto del país.

No es secreto para los colombianos que los pobladores del Eje Cafetero tienen una fuerte influencia paisa (manera en que son conocidos los habitantes del departamento de Antioquia) en sus tradiciones. Esto obedece a que hace muchos años, algunos pobladores que se dedicaban a las labores del campo decidieron salir en busca de nuevas tierras y  con mejores oportunidades.

Como resultado se gestó la fundación de esta pujante región colombiana. Aunque no tiene playa, brisa y mar, el Eje Cafetero es una de las zonas más visitadas de Colombia. Es que este lugar es fuente de una enorme belleza y biodiversidad, rodeado de verdes montañas, volcanes nevados, nacimientos de agua, ríos y cascadas. Sumado a todos estos tesoros naturales, se encuentran sus comidas típicas, caracterizadas por su “sencillez”, abundancia y gran sabor.

Para disfrutar plenamente el Eje Cafetero, se debe compartir con su gente hermosa y amable, recorrer sus paisajes y por su puesto probar sus deliciosos platos típicos. La mayoría de los menús fueron heredados cuando los antioqueños recibieron los saberes culinarios que se propagaron en la época de la colonia española.

Estos son algunos de los deliciosos platos típicos que se pueden disfrutar estando en el Eje Cafetero:

– La bandeja paisa es la reina de los platos típicos, no solo es la más conocida del país, sino que también es la más completa, generosa y abundante de todas las comidas del Eje Cafetero y de Antioquia. Este famoso manjar está compuesto por frijoles, arroz, carne molida, chicharrón, chorizo, huevo frito, arepa, tajada de plátano frita, morcilla, aguacate y mazamorra o jugo de fruta… recuerden todo en gran abundancia.

– La trucha arcoíris, es otro de los platos líderes del Eje Cafetero, especialmente en el Quindío, donde se han profesionalizado en la crianza de estos peces. En lugares como el municipio de Salento (Quindío) o el corregimiento de La Florida (Pereira, Risaralda) se puede degustar este espectacular plato. La trucha se puede preparar de distintas maneras, las más populares en esta zona del país, son a la plancha, al ajillo, gratinada, con salsa de camarones o con salsa de champiñones, además suele servirse sobre un enorme y crujiente patacón de plátano.

– El calentao paisa es un plato bastante particular, pues se caracteriza por aprovechar los rezagos de la comida del día anterior. Si de casualidad quedan arroz y fríjoles o algún otro grano, se conserva cuidadosamente en la nevera y en la mañana siguiente se convierten en el desayuno. Para la preparación se calientan los fríjoles (o los granos que se hayan reservado) y el arroz, mezclando todo con guiso de cebolla y tomate y se sirven acompañados con arepa.

– La arepa es el acompañante por excelencia de las comidas del Eje Cafetero, es una especie de tortilla gruesa de maíz que asa al carbón. Las hay de diversos tamaños y muchas veces también se convierten en el plato principal, pues se prepara arepa con queso, con guiso, con carne frita o desmechada, con mantequilla, con guacamole, con huevos en toda variante, con pollo y casi que con cualquier ingrediente que se le quiera poner.

– La Parva. Esta pequeña comida se toma en la mañana, en la tarde o en la noche, el horario nunca es un problema. La parva es una selección de pequeños productos de panadería, como los buñuelos, los pandebonos, los pandeyucas, los pandequesos, las tostadas y los panes clásicos, que se utilizan especialmente para el “algo”, término paisa para referirse al refrigerio o las onces. Tradicionalmente, la parva del algo, se consume acompañada de una buena taza de chocolate y una gran tajada de queso campesino.