La Lagunilla, ubicado en la CDMX, es uno de los tianguis en los que se compran algunas de las mejores cervezas mexicanas.
CORRESPONSAL EN MÉXICO
Es probable que los puristas de la buena cerveza y de las prácticas correctas para disfrutarla no estén de acuerdo con la existencia de las micheladas en el mundo. No obstante, en México son tan populares como la enorme variedad de comida de calle que acompañan en una mesa.
La michelada mexicana consiste en una cerveza (de preferencia clara), que se prepara con una base de jugo de limón, algunas veces una mezcla de salsas orientales y picantes, así como la orilla escarchada de limón.
Hay tantas formas de micheladas, como personas que las preparan. No obstante, la receta clásica es esa. Las micheladas pueden ser caseras, de restaurante y, por supuesto, de tianguis y mercados.
En la CDMX, en el tianguis de La Lagunilla es uno de los sitios en lo que se las vende en formatos enormes y con ingredientes exóticos y nada comunes. En este lugar se pueden encontrar las clásicas, de un litro, que con camarones, ostiones, fruta picada y un sinfín de toppings picantes. Lo mismo gomitas con chile, que pinchos con tamarindo y hasta carne seca. Estar en México es la excusa perfecta para probar todas las micheladas que se pueda. Es toda una aventura sin fin.