Muchos turistas pasan por el paso obligado para visitar el Hornocal y Uquía para contemplar de un sinfin de actividades para realizar en el atractivo jujeño.
Humahuaca sorprende gratamente. El Cabildo de la Municipalidad de Humahuaca, un llamativo edificio blanco, custodia la plaza principal. A pocos metros, la iglesia Nuestra Señora de la Candelaria, descansa con esa parsimonia tan especial de los pueblos norteños.
En su interior habitan doce cuadros del 1764, que representan a los doce profetas. A pocos metros de ahí, el colosal Monumento a los Héroes de la Independencia corona con grandiosidad el silencio de la tarde sofocante. En lo alto de todo, la gran figura del cacique Viltipico, poderoso referente de la tribu omaguaca, se destaca sobre un cielo desnudo y limpio.
Algunas de las razones por la que Humahuaca debería ser una visita casi obligada en el recorrido de la Quebrada que lleva su nombre.